Pietro Carta y Paolo Mannoni son de la misma quinta: 1899. El padre de Pietro estĂĄ a cargo de las tierras del padre de Paolo, don Pasqualino Mannoni, de los Mannoni que se hicieron ricos con el pecorino. Viven en el pequeño pueblo de Lollove, en pleno corazĂłn de Cerdeña, y juntos se crĂan al aire libre, bajo la estricta supervisiĂłn de Annica, la gobernanta.
El señorito Paolo, frĂĄgil y dependiente, va a la escuela y se precia de enseñar a Pietro a leer y a escribir. Pietro, fuerte como una crĂa de muflĂłn, presume de conocer todos los secretos de la naturaleza. En el continente ha estallado la Gran Guerra, y llega el dĂa en que Paolo es llamado a filas y que Pietro, por un pacto entre familias, se ve obligado a alistarse tambiĂ©n. Pero en el frente esos pactos de clase son papel mojado, igual que la brecha entre ricos y pobres.