¿Qué pasa cuando caen las barreras entre terapeutas y pacientes, cuando todos participan en diálogo sobre el cambio y cuando incluso todos cambian de roles? Como dice Lynn Hoffman en el prólogo de este importante libro, se modifica de manera drástica la posición de los miembros de la familia con respecto a los profesionales que los atienden. El concepto del grupo reflexivo trabaja sobre la idea de que todos participan en un diálogo sobre el cambio. El equipo ya no le hace algo "a" la familia sino que hace algo "con" ella, y la terapia se convierte entonces en una empresa en colaboración. No se trata de un nuevo método ni de una nueva escuela de terapia familiar. Pertenece a un nivel de abstracción más general, un nivel de valores y posición terapéuticos. En el proceso se modifican los roles, las reglas y las expectativas de la terapia. En este libro se describe la evolución de esta nueva estrategia en Noruega, y su adaptación en Estados Unidos por diversos terapeutas de familia.