Los salmos perduran. A lo largo de los siglos, los cristianos han leído, orado y cantado esta rica colección de poemas. Pero en nuestra era actual de distracción, los ritmos diarios de la vida moderna giran más en torno a las pantallas que a los textos bíblicos.
Este libro sostiene que los salmos son poesía para el alma, poesía que nos moldea. Más allá de destacar la poesía del Salterio, el libro presta atención al peso teológico de estos poemas. De este modo, aprendemos a leer las Escrituras con más atención y a amar bien a Dios y al mundo.
La primera parte del libro explora cómo podemos leer los salmos en medio de la prisa de las distracciones modernas. La segunda parte avanza salmo por salmo, mostrando lo que estos poemas pueden enseñarnos sobre cómo vivir de una manera más enfocada y atenta.
Este libro cautivador demuestra cómo nuestros pensamientos, emociones y adoración al Dios trino se afinan y profundizan a través de los salmos. En una era de rostros tenuemente iluminados y multitareas, la poesía de los Salmos sigue lista para entrenar nuestros oídos, estabilizar nuestros corazones y enseñarnos a orar para que podamos florecer en Cristo. El libro incluye un prólogo de Elizabeth Robar.