Un jefe, su ayudante, una tormenta de nieve y una sola cama. ÂżQuĂ© mĂĄs podrĂa salir mal?
Lo llaman Doctor Perfecto.
Yo lo llamo Doctor Distante, Doctor Arrogante, Doctor Si-vas-a-despedirme-hazlo-de-una-vez.
Si tuviera otra opciĂłn, presentarĂa mi dimisiĂłn, pero, por desgracia para mĂ, necesito el trabajo. AsĂ que decidĂ aprovechar la oportunidad de impresionarle entregĂĄndole en persona unos documentos importantes.
SĂ, es cierto que en ese momento se encontraba en una remota isla escocesaâŠ, aunque yo lo tenĂa todo previstoâŠ
Hasta que se canceló la salida del ferry de vuelta, no encontré ninguna habitación libre en la isla y se desató una tormenta de nieve.
Por lo que he acabado encerrada con mi jefe âun hombre impresionantemente guapo que casi no se sabe mi nombreâ en una pequeña cabaña de solo un dormitorio en medio de la nada.
Pero, a diferencia de la nieve en el exterior, su mirada helada ha empezado a derretirse, y me parece que no vamos a necesitar un generador para mantener el calor en el interior.