«HabÃamos estado excavando (en el Valle de los Reyes) durante seis temporadas enteras... habÃamos trabajado durante meses en una franja de tierra sin encontrar nada y solo un excavador sabe lo desesperantemente deprimente que eso puede resultar... nos estábamos preparando para dejar el Valle cuando en un último esfuerzo desesperado hicimos un descubrimiento que sobrepasaba con mucho nuestros sueños más audaces.»
Este descubrimiento, equiparable por su importancia a otros descubrimientos de islas y nuevos continentes exploraciones de rÃos y valles, escaladas de montañas y vueltas al mundo... es el que nos narra Howard Carter jefe de la expedición que financiada por lord Carnarvon descubrió la tumba de Tut-Ankh-Amón.
Recordemos que dicho descubrimiento causó un gran impacto social en los felices años veinte creando, o relanzando, una moda egipcia de vestimenta, cinematográfica, operÃstica, que no excluÃa la novela de misterio a la que la muerte por picadura de mosquito el 6 de abril de 1923 de lord Carnarvon contribuyó en gran manera a la creación de la leyenda de la maldición de la momia, claro que eso es otra historia y en cualquier caso otro libro.