Estando por vivir las festividades carnestolendas, un personaje eminente de la sociedad muere en un accidente que se convierte en piedra de escĂĄndalo y de morbo a la vez. Dicho acontecimiento fractura desde el inicio el equilibrio de una sociedad de clase media y abre una serie de comportamientos anĂłmalos que, en otras circunstancias, no se hubiesen permitido los decentes ciudadanos de provincia.
A propĂłsito del tĂtulo de la obra, La comparsa (1964), corre el riesgo el lector de quedarse con una impresiĂłn festiva del texto y no llegar hasta la profundidad de su sentido que tiene que ver con el binomio vida/muerte. Para crear su propio mundo fictivo el autor tomĂł de su contexto histĂłrico-social los dos mencionados acontecimientos ocurridos en la Xalapa de 1959. Si bien al parecer, y segĂșn algunos testimonios, muchos de los personajes estaban inspirados en personas de la sociedad xalapeña âlo que perturbĂł a algunos lectores de entonces que no supieron marcar una diferencia entre la ficciĂłn y la realidadâ; para nosotros, en cambio, es fĂĄcil apreciar mejor la verdadera intenciĂłn de la obra sin ningĂșn elemento que nos provoque ruido, como dicen los comunicadores.