ÂżQuĂ© fue lo que hice al anunciar este seminario bajo el tĂtulo de "La vida-la muerte", es decir, reemplazando por un guion o por un espaciado sin Ă©l o por un guion sin palabra, por un silencio marcado, la y que en general pone la muerte con la vida, yuxtapuesta la una a la otra o, más seguramente, opuesta? Lo que quizás aparece justamente como problema en lo referido a la vida la muerte es la relaciĂłn de yuxtaposiciĂłn o de oposiciĂłn, la relaciĂłn de posiciĂłn, la lĂłgica de la posiciĂłn (dialĂ©ctica o no dialĂ©ctica).
En La vida la muerte, uno de sus seminarios más fructĂferos, Jacques Derrida propone pensar en la vida y la muerte en virtud de una lĂłgica que no plantearĂa la muerte como lo opuesto a la vida. Al invertir la perspectiva clásica, Derrida muestra a sus estudiantes que es la muerte, justamente, la que hace posible la vida.
En catorce fascinantes sesiones impartidas durante 1975-1976, Derrida deconstruye la tradicional oposiciĂłn entre la vida y la muerte a travĂ©s de lecturas diversas y deliberadamente multidisciplinarias, desarrollando su pensamiento tanto en contacto con la filosofĂa (Hegel, Nietzsche, Heidegger) como con la epistemologĂa de la ciencia (Georges Canguilhem), la genĂ©tica contemporánea (François Jacob) y el psicoanálisis.
En ese recorrido se evidencia la dedicaciĂłn con la que Derrida, uno de los filĂłsofos franceses más importantes del siglo pasado, no solo preparaba sus escritos destinados a la exposiciĂłn oral, sino tambiĂ©n en las relecturas constantes que hacĂa de sus propias escrituras.