Instalada en el más puro concepto de la salud integral y comunitaria, Elena de la Aldea recorre en este libro el paradigma de los cuidados y su potencialidad ante una serie de procesos humanos: la infancia, la enfermedad, la discapacidad, la vejez y la muerte; la maternidad, las migraciones, la juventud, las prácticas médicas, y las diversas formas de maltrato y descuido de los medios de comunicación.
En cada caso, identifica las carencias naturalizadas y los condicionamientos económicos, sociales y culturales que han impedido el florecimiento de una praxis liberadora, reflexiva y solidaria. Especializada en dinámicas sociales de base, la autora releva el valor de la solidaridad, no como decisión ideológica, sino como la única vía para dar sentido a nuestra experiencia social colectiva, y como la más sólida herramienta de defensa ante un capitalismo voraz que ha debilitado nuestros lazos esenciales con los demás y con la naturaleza.