Este reportaje, a cargo de uno de los más capacitados periodistas de investigación de Venezuela, se lee como una novela gracias a su interés por el mundo íntimo y las vueltas del destino de sus dos protagonistas: en primer lugar, María Lourdes Afiuni, jueza convertida en prisionera por orden directa de Hugo Chávez Frías; en segundo lugar, Eligio Cedeño, el banquero a quien Afiuni liberó de un encierro similar al que luego –en represalia por su desobediencia al poder militar absoluto–le tocaría sufrir a ella.
Francisco Olivares compone aquí una historia que encierra el drama del secuestro de las instituciones democráticas, la tragedia de toda una república, en torno a esa mujer encerrada, a esa cruel paradoja que implica la transformación en víctima de alguien que solo hizo lo que la nación le había encargado: administrar justicia.
Editorial Dahbar se enorgullece en presentar a los lectores este enjundioso trabajo periodístico –que alcanza su cuarta edición– por su calidad testimonial y su seriedad investigativa, pero también por su valor como denuncia del rumbo que ha tomado Venezuela.