En los últimos años la mayoría de mis trabajos han estado dedicados a una cuestión sustantiva: los problemas que suscita la aplicación del derecho, la aplicación de pautas generales a casos individuales y, en especial, las cuestiones referidas a la aplicación de la Constitución1. Sin embargo, durante estos años también he publicado algunos trabajos de carácter metodológico, que procuran suministrar un espacio conceptual para acomodar las tesis de carácter sustantivo. Se trata de elaborar un concepto de derecho, y de dar cuenta de sus relaciones con la moralidad, que acoja la posibilidad de que la aplicación del derecho sea un espacio en donde la moralidad y el derecho se entrecrucen.
Gracias a la inmensa generosidad de mi colega y amigo, el profesor Carlos Bernal Pulido y de la magnífica labor editorial de la Universidad del Externado de Colombia (Bogotá), tengo ahora la oportunidad de presentar estas reflexiones, dispersas en revistas y volúmenes colectivos varios, en un modo unitario, en un libro.
He decidido llamarlo El derecho: diagramas conceptuales, porque se trata de esto. Se trata de dibujar, esbozar, explorar vías metodológicas diversas con el fin de construir una casa habitable para una teoría jurídica que dé cuenta de los problemas que discutimos en las aulas de las Facultades de Derecho de todo el mundo, en el foro y en el espacio público. Es decir, si la Constitución (por ejemplo la de los Estados Unidos) ampara el matrimonio entre personas del mismo sexo, si la Constitución (española en este caso) es compatible con la prisión perpetua o con la celebración de un referéndum consultivo sobre la secesión de Cataluña dirigido sólo a los catalanes, o si la Constitución (colombiana esta vez) es compatible con determinadas medidas de carácter penal y procesal que forman parte de los acuerdos de paz de La Habana.