Hace apenas una semana de la boda de Pietro y Giuliana, y poco más de un mes desde que se conocieron. Él es un abogado de clase acomodada, fatigado de una vida sosegada en la que reina el orden; ella, una excéntrica muchacha de origen más humilde que, tras huir de casa a los diecisiete años, ha debido valerse por sí misma. Pietro ha invitado a su familia a una comida en su apartamento para intentar tranquilizar a la madre, que no ve el repentino matrimonio con buenos ojos: esta reunión familiar se convertirá en la prueba de fuego de la joven pareja. "Me casé por alegría" es la pieza teatral más célebre de Ginzburg; la maestría en la construcción de los personajes y la viveza de los diálogos hacen de ella no sólo una comedia hilarante, sino también una aguda reflexión sobre los mecanismos de la felicidad, que transgreden las convenciones y los prejuicios más arraigados.
"Es difícil hacerse con el secreto de la prodigiosa prosa de Natalia Ginzburg".
Elena Hevia, El Periódico
"Una obra atemporal sobre el matrimonio, la frivolidad aparente de algunas jóvenes y las desigualdades sociales. Una delicia menor".
E. Costa, El Cultural
"La obra se resuelve en un toma y daca aparentemente insustancial y cotidiano, pero que, sin darnos cuenta, nos ofrece una disquisición crítica de la sociedad del momento, de la hipocresía, de la amistad, de la ética y de la búsqueda, a veces desesperada, de lo que cada cual entiende por felicidad".
M. S. Suárez Lafuente, La Opinión A Coruña Saberes