Las leyes del pensamiento son las leyes del destino. Cualquier cosa en la que creas con sentimiento, la atraes a tu vida.
Estos pequeños ensayos pretenden instruir al lector acerca de la Verdad Espiritual båsica y suministrar material para meditaciones cortas. Los mismos fueron publicados de a uno semanalmente a lo largo de los años.
Los temas son usualmente manejados con un estilo ameno y entretenido y a menudo se mezclan con incidentes familiares de la vida cotidiana.
La razĂłn de esta polĂtica es la siguiente:
El escritor ha creĂdo siempre que las verdades metafĂsicas, filosĂłficas y espirituales se pueden decir en un lenguaje llano y simple, de manera tal que cualquier niño inteligente pueda entenderlas.
Es cierto que la mayorĂa de los escritos sobre estos grandes temas han sido muy oscuros y llenos de jerga tĂ©cnica, pero este autor lo cree innecesario.
Ciertos temas, como las altas matemĂĄticas, por ejemplo, deben permanecer fuera del alcance del lego, pero esto no es importante, ya que los mismos no conciernen a la vida prĂĄctica.
En cambio, el entendimiento de la verdad espiritual, no sĂłlo concierne a todo hombre, sino que es una necesidad vital, y necesariamente debe existir para Ă©l, la posibilidad de obtenerla de forma tal que la pueda usar.
El mås excelso y profundo conocimiento espiritual debe estar al alcance de cualquier persona razonablemente inteligente de mås de diez años de edad.
Estas grandes verdades se nos revelan en la actualidad, pero no en las påginas de tratados inaccesibles sino en los aparentes, pequeños e insignificantes detalles de la vida cotidiana.
Tales detalles pråcticos (los problemas y las experiencias del diario vivir), presentan los interrogantes y también suministran las respuestas a los grandes problemas de la vida humana, cuando se posee la llave espiritual.
El autor intenta evitar tanto como le sea posible, el uso de terminologĂa tĂ©cnica y nunca emplea una palabra de tres sĂlabas si puede utilizar una de dos.
Cada una de estas Chispas ilustran una o mĂĄs de las leyes de la psicologĂa o de la metafĂsica.
Trata en cada caso de encontrar quĂ© ley particular estĂĄ involucrada y luego fĂjate si estĂĄs usando aquella ley constructivamente en tu propia vida. Si no lo estĂĄs haciendo, debes cambiar tus hĂĄbitos de pensamiento sin demora, ya que las leyes del pensamiento son las leyes del destino.
Una pequeña chispa puede encender un gran fuego