Gabriel de Araceli, "el hombre que nació sin nada y lo tuvo todo", rememora desde la madurez uno de los episodios más decisivos de la historia naval: la batalla de Trafalgar. Con apenas catorce años, este joven se convierte en testigo excepcional de la derrota sufrida por las flotas española y francesa frente a la armada británica comandada por el legendario vicealmirante Nelson, el 21 de octubre de 1805.
Su relato nos transporta al Santísima Trinidad, el navío más imponente de su tiempo, apodado "El Escorial de los mares", donde se desarrolla una narración vibrante, cargada de heroísmo, dramatismo y el inconfundible estilo realista de Benito Pérez Galdós.
Una obra que combina historia, aventura y reflexión, ideal para quienes buscan comprender la grandeza y la tragedia de España en el siglo XIX.













