¿Y si me había equivocado? ¿Y si al final era él?
Después de que mi pareja de toda la vida me dejara plantada una semana antes de nuestra boda, decidí cerrarme en banda a cualquier nueva relación. Ni las fiestas con mis amigas ni la Navidad consiguieron levantarme el ánimo y sacarme de mi madriguera…
Hasta que apareció él. Matías, el mejor amigo de mi ex.
Alto, guapo, ojos verdes… No me fue muy difícil caer en la tentación y dejarme llevar en lo que finalmente fue una noche desenfrenada. Sin embargo, a pesar de que estaba claro que era eso, una sola e increíble noche, ahora soy incapaz de dejar de pensar en él, y es que quizá tenga que admitir que al final era él el hombre que siempre había deseado.