La representación de las mujeres en el cine español es todavía escasa, tanto en términos cualitativos como cuantitativos. Concretamente, dentro del thriller, una de las fórmulas con mayor éxito popular y reconocimiento crítico, la presencia de mujeres es deficitaria.
El empeño de Cuestión de género: mujeres y thrillers en el cine español es hacer un recorrido intensivo por cintas fundamentales dentro de un género tan heterogéneo que incluye filmes con características propias del noir, pero que también abarca producciones tan autóctonas como las que se realizan dentro del cine quinqui. Así pues, el recorrido es amplio y diverso, revisando títulos clásicos como Los peces rojos (Nieves Conde, 1955) o Muerte de un ciclista (Juan Antonio Bardem, 1955); pasando por cintas de autor como El crimen de Cuenca (Pilar Miró, 1979) o Deprisa, deprisa (Carlos Saura, 1981); hasta propuestas más actuales como Salto al vacío (Daniel Calparsoro, 1994) o Buried (Rodrigo Cortés, 2010).
En total, una suma de ciento veinte películas, ciento treinta y cinco personajes femeninos y más de ocho mil figurantes que se han analizado con el fin de determinar por qué la infrarrepresentación de las mujeres en el thriller es, sin duda, una cuestión de género.