La escuela es un escenario esencial de socialización política. En ella aprendemos a reconocer, valorar y representar la sociedad que habitamos. Durante varias décadas se ha mostrado el papel central que juega esta institución y sus dispositivos de saber en la reproducción de estereotipos y estigmatizaciones relacionadas con la racialización de las personas afrodescendientes. La experiencia del racismo es uno de los mayores actos de vulneración de la dignidad humana, sobre todo cuando se ejerce sobre niñas y niños pequeños. En este libro retomamos las lecciones y aprendizajes de quince años de trabajo investigativo sobre el racismo en la escuela colombiana y sus impactos más significativos en el campo de los derechos de las poblaciones negras, palenqueras, afrocolombianas y raizales. Ponemos en manos de lectoras y lectores nuestra mirada sobre las prácticas pedagógicas, la iconografía, las políticas de conocimiento, los rituales de la cultura escolar y los asociados al racismo escolar. La mayoría los reconocimos en escenarios como Bogotá, Cali, Cartagena y Popayán. Entendemos que si bien el racismo se manifiesta al interior del sistema educativo, existen planos exteriores íntimamente relacionados con esta problemática. Por esta razón, su manifestación en la escuela es solo el síntoma de un proceso más complejo que está incrustado en las estructuras ideológicas de nuestras instituciones. Este libro es también una manera de rendir tributo y reconocimiento a las personas y organizaciones que lucharon en el pasado y continúan en el presente enfrentando con fuerza e inteligencia este terrible flagelo que tanto daño ha producido en el mundo.