Carta del señor Galileo Galilei, Académico Linceo, escrita a la señora Cristina de Lorena, Gran Duquesa de Toscana
A la SerenĂsima Señora la Gran Duquesa Madre:
Hace pocos años, como bien sabe vuestra serena alteza, descubrĂ en los cielos muchas cosas no vistas antes de nuestra edad. La novedad de tales cosas, asĂ como ciertas consecuencias que se seguĂan de ellas, en contradicciĂłn con las nociones fĂsicas comĂșnmente sostenidas por filĂłsofos acadĂ©micos, lanzaron contra mĂ a no pocos profesores, como si yo hubiera puesto estas cosas en el cielo con mis propias manos, para turbar la naturaleza y trastornar las ciencias. Olvidando, en cierto modo, que la multiplicaciĂłn de los descubrimientos concurre al progreso de la investigaciĂłn, al desarrollo y a la consolidaciĂłn de las ciencias, y no a su debilitamiento o destrucciĂłn. Al mostrar mayor aficiĂłn por sus propias opiniones que por la verdad, pretendieron negar y desaprobar las nuevas cosas que, si se hubieran dedicado, a considerarlas con atenciĂłn, habrĂan debido pronunciarse por su existencia. A tal fin lanzaron varios cargos y publicaron algunos escritos llenos de argumentos vanos, y cometieron el grave error de salpicarlos con pasajes tomados de las Sagradas Escrituras, que no habĂan entendido correctamente y que no corresponden a las cuestiones abordadas.