Para un actor que crea oportuno preguntarse por la existencia de una tĂŠcnica interpretativa y por las dificultades que como individuo tiene para articularse con ella. Para un director inquieto por descubrir un lugar del ensayo o un momento de una representaciĂłn donde sea posible amar a un actor. Para una mujer o un hombre cercanos al arte del actor dispuestos a sostener una reflexiĂłn sobre los fundamentos del conocimiento interpretativo, tratando de discernir los pilares tĂŠcnicĂłs del mismo.
El actor pide. El director pide. El espectador pide. Como si de organizar una gran cĂłmplicidad se tratara donde podamos seguir interrogĂĄndonos por el valor de una acciĂłn y una palabra.
El actor pide retoma los lugares mĂĄs fecundos de un diĂĄlogo de Stanislavski abriendo vĂas hacia un conocimiento profundo y comprometido con la esencia de la actuaciĂłn.