(0)

Tanto vales cuanto tienes

E-bog


Tanto vales cuanto tienes. Ángel Saavedra. Duque de Rivas

Fragmento de la obra

Acto I

La decoración es inmutable, y representa una sala de una casa particular. Al fondo, una puerta (del cuarto destinado para don Blas); a la izquierda, tres puertas (la primera, que comunica con la anterior de la casa; la segunda, al aposento de don Alberto; la tercera, a los de doña Rufina y doña Paquita); a la derecha, otra puerta (que da al corredor y escalera) y dos balcones que caen a la calle.

Escena I

Ana y Pascual, con capa y sombrero

Ana: ¿Te vas ya a lucir el talle

porque salió la señora?…

¿O a la taberna?

Pascual: Habladora;

barra, guise, friegue y calle.

Voy adonde mandó el ama,

que por mi gusto me fuera

a mi cuarto y me tendiera

a descansar en la cama.

Ana: Muy bien te lo creo, sí,

pues sabes solo hacer eso,

mientras cargas todo el peso

de la casa sobre mí.

(Vase Pascual por la derecha.)