Los aceites esenciales son sustancias oleosas y sumamente fragantes obtenidas de diversos vegetales y que sirven de base para la aromaterapia, esto es, la curaciĂłn a travĂŠs de los aromas. Pueden proceder de diferentes lugares de la planta en cuestiĂłn, tales como flores, frutos, hojas, raĂces, madera, semillas y corteza de los vegetales.
El aceite de cedro, por ejemplo, se extrae de la madera de ese ĂĄrbol, el de hinojo de las semillas y el de limĂłn de la corteza del fruto. Apelando a una metĂĄfora, se podrĂĄ decir que el aceite esencial es el alma de la planta contenida en un frasco y que es el medio por el cual los vegetales transmiten sus propiedades.
Efectivamente, cada uno de estos aceites posee una determinada combinaciĂłn de componentes quĂmicos que lo hace especialmente apto para determinados fines curativos, cosmetolĂłgicos y hasta espirituales. Comencemos, entonces, este primer capĂtulo haciendo una breve pero necesaria referencia a esos elementos quĂmicos que hacen que un aceite esencial sea lo que es.