Las cartas que aparecen en este libro son, sobre todas las cosas, un monumento a la camaraderĂa y la amistad sincera y duradera. Luego de perder a su padre a los seis años, James Agee se mudĂł con su madre a Knoxville, Tennesse, donde se matriculĂł en un internado episcopaliano. AllĂ trabĂł amistad con uno de sus maestros, el pastor James Harold Flye, con quien mantendrĂa una larga e Ăntima relaciĂłn epistolar desde los quince años hasta el dĂa en que lo sorprendiĂł una muerte prematura.
Estas cartas ofrecen un magnĂfico retrato de este gran escritor estadounidense, de su riquĂsima vida interior y de su tumultuosa trayectoria vital. Son un manual de instrucciones y sacrificios para escritores noveles, son una crĂłnica social y polĂtica de treinta años convulsos de la historia de los Estados Unidos, son un notable documento de crĂtica literaria y cinematogrĂĄfica, una recopilaciĂłn de sueños y ambiciones de juventud, el amargo reconocimiento de un fracaso y una reconciliaciĂłn tardĂa con el arte como empresa comĂșn, solidaria y esencialmente anĂłnima.