Recopiladas por primera vez en un solo volumen, las narraciones de Robert Walser sobre el mundo de la oficina resultan esclarecedoras, divertidas y, sobre todo, profundamente anticipatorias.
El autor de El paseo comenzĂł a escribir hacia 1900, cuando iniciaba su vida laboral. Como aprendiz en un banco, considerĂł que la oficina era algo de una irritante novedad; a sus ojos, suponĂa la encarnaciĂłn de una existencia predeterminada y carente de sentido, al mismo tiempo que el lugar donde surgĂan los sueños y fantasĂas que permitĂan al poeta adueñarse de la realidad.
Los relatos de Walser a propĂłsito de los empleados, al igual que las sĂĄtiras de Melville, GĂłgol o Kafka sobre la burocracia, proyectan una luz tan esclarecedora como divertida en torno a la racionalizaciĂłn y la disciplina del mundo del trabajo.
BELEN
10/11/2021
He sido oficinista muchos años y desde muy joven. Creo que entiendo lo que Walser transmite, pero en muchos aspectos tos se ha quedado atrĂĄs en el tiempo. Hay algo que subsiste, sin duda, aĂșn hoy, pero la mayor parte se ha quedado anticuada.