Un libro que nos anima a observar nuestro comportamiento desde una nueva perspectiva.
«Quiero hacer en este libro algunas insinuaciones sobre lo que podríamos hacer mejor en la economía, la sociedad y la política. No solo se trata en ello de buena o mala disposición. Se trata de cómo puede fomentarse nuestro compromiso para con los demás, en un momento en el que nuestro modelo de sociedad está en juego como no lo estaba desde hace muchos decenios. Y de propuestas de cómo podríamos modificar las instituciones sociales de modo que hagan más fácil el bien y más difícil el mal.»
R. D. Precht
¿Por qué nos resulta tan difícil ser buenos? ¿Es el ser humano bueno o malo? ¿En el fondo somos egoístas o altruistas? Y ¿cómo es posible que casi todos los seres humanos nos declaremos en mayor o menor medida a favor de «los buenos»y, sin embargo, haya tanta desgracia en el mundo?
En El arte de no ser egoísta, el reconocido filósofo alemán Richard D. Precht desarrolla una interesante aproximación a la naturaleza moral del ser humano, sin plantear exigencias sobre cómo tiene que ser el hombre. Analiza la cuestión de cómo nos comportamos en nuestra vida diaria y de por qué somos como somos: egoístas y altruistas, competitivos y cooperativos, cortos de miras y conscientes de nuestras responsabilidades. Porque cuanto más y mejor conozcamos nuestra naturaleza mejor actuaremos en la sociedad, en la economía y en la política.