Esta vez mi amigo Metomentodo Squitt me ha vuelto a involucrar en un extraño caso que transcurre nada más y nada menos que ¡durante las Olimpiadas! Mientras retransmitíamos las competiciones, caímos en la cuenta de que había un equipo que ganaba todas las pruebas olímpicas. Y también reparamos en que los atletas de ese equipo se parecían demasiado los unos a los otros…