Federico Stahl es uno de los grandes personajes de la
literatura latinoamericana de este principio de siglo. En El
orden del mundo, asistimos a una de sus aventuras mĂĄs
intensas y emocionantes: lo que comienza con modales de
novela realista, con recuerdos de la infancia y un registro
transparente, va complicĂĄndose a medida que nos
adentramos en las circunvalaciones mentales de Stahl.
Sanchiz sabe que en literatura la forma es el fondo. Hay en
su narraciĂłn mĂĄs universos de los que creemos, y un continuo
y desmesurado intento de poner en orden la entropĂa del
mundo âÂżla basura del mundo?â, sin que ello implique
desconocer a quĂŠ delirios puede llevar ese intento. Este libro
es corto pero alberga multitudes, como Stahl y como el
mismo Sanchiz.
Edmundo Paz SoldĂĄn
Federico Stahl es uno de los grandes personajes de la literatura latinoamericana de este principio de siglo. En El orden del mundo, asistimos a una de sus aventuras mĂĄs intensas y emocionantes: lo que comienza con modales de novela realista, con recuerdos de la infancia y un registro transparente, va complicĂĄndose a medida que nos adentramos en las circunvalaciones mentales de Stahl.
Sanchiz sabe que en literatura la forma es el fondo. Hay en su narraciĂłn mĂĄs universos de los que creemos, y un continuo y desmesurado intento de poner en orden la entropĂa del mundo âÂżla basura del mundo?â, sin que ello implique desconocer a quĂŠ delirios puede llevar ese intento. Este libro es corto pero alberga multitudes, como Stahl y como el mismo Sanchiz.
Edmundo Paz SoldĂĄn
En Estados Unidos, a principios del siglo xxi, un antiguo piloto de aviones de combate devenido millonario se propone coleccionar antiguos cazas soviĂŠticos de la guerra frĂa. Para ello contrata al narrador de la novela, Federico Stahl, experto en la materia. El proyecto lleva a Federico alrededor del mundo en busca de las mĂĄquinas, pero una, la mĂĄs deseada por su empleador, insiste en eludirlo.
Finalmente, una serie de fotografĂas satelitales delatan a la aeronave âun MiG-25â sobre una isla de basura formada en el AtlĂĄntico Norte. Luego de que su barco naufraga, Federico debe esperar su rescate varado en la isla, rodeado de la basura de nuestro mundo y, quizĂĄ, de muchos otros.