Muy conocido y apreciado en el mundo de habla castellana por su hermenéutica filosófica, Hans-Georg Gadamer (1900-2002) era también uno de los discípulos más antiguos de Heidegger. Él mismo se consideraba "testigo ocular" del impacto y de la fascinación que llegó a causar con sus planteamientos y conceptos completamente inusuales en el mundo académico de la filosofía en las primeras décadas del siglo xx. Aun así, Gadamer insiste a lo largo de estas páginas en que tanto la fascinación por Heidegger como el rechazo de su supuesta "oscuridad" no son vías adecuadas para comprenderlo.
En los textos de este volumen, escritos a lo largo de las últimas tres décadas para públicos y ocasiones muy diversas, Gadamer describe los caminos de pensar de Heidegger, desde sus primeras inquietudes teológicas y sus intentos de renovar la interrogación filosófica en el ambiente confuso después de la Primera Guerra Mundial.
Los ensayos muestran con gran claridad la posición de Heidegger frente al neokantismo predominante a principios del siglo, su participación en a la fenomenología de su maestro Husserl, a la que abandonó para volver a los comienzos de la filosofía occidental. En la antigua Grecia y en los primeros intentos de pensar, Heidegger esperaba encontrar aún en toda su pureza la pregunta por el ser, que a lo largo de la historia de la filosofía occidental quedo olvidada con el creciente predominio del pensamiento científico.