Este libro incluye los que creo que son mis mejores poemas de amor (y desamor), porque de eso es de lo que mayormente escribo, de ese maremĂĄgnum de emociones que se generan en mĂ, cuando algunos hombres irrumpen en mi vida, desatando la inspiraciĂłn tan solo con existir. Cada poema que he escrito lleva entre sus lĂneas el nombre de quien lo ha inspirado: su muso. Cuando los releo, revivo su paso por mi vida, y celebro que cada uno de ellos haya dejado tras de sĂ una estela de versos. Como dice Julia Viciana: «Yo no soy la musa, soy la artista»; y aunque a la RAE no le vaya a hacer mucha gracia, las poetas somos mujeres, somos artistas, y algunas tenemos musos. En este 2021 desolador y maldito, plagado de desgracias a lo largo y ancho de todo el globo, me siento la persona mĂĄs bendecida de la Tierra, porque el sueño de toda mi vida, al fin, se ha cumplido. OjalĂĄ que los trozos de mi ser que van en estas letras y en estas hojas lleguen a rozar tu alma, y se forje entre nuestras existencias ese vĂnculo mĂĄgico e indestructible que sĂłlo la poesĂa genera.