Algo terrible le ha ocurrido a Peach. Le duele caminar y sĂłlo tambaleĂĄndose es capaz de llegar a casa, donde la pesadilla continĂșa: sus padres no parecen darse cuenta de nada. Peach deberĂĄ recomponerse sola, juntar los pedazos que quedan de sĂ misma, antes de retomar la rutina de su vida diaria: su novio Green, sus amigos, las clases. Pero no es fĂĄcil concentrarse cuando le asalta el recuerdo de una enorme boca abierta, cuesta comer cuando siente el estĂłmago hinchado como un tambor y es imposible dormir cuando el olor a grasa achicharrada llena sus fosas nasales. A pesar de que intenta cerrar los ojos ante lo que ha sucedido, Peach comienza al fin a entender quĂ© debe hacer para superarlo y a reunir el valor necesario para llevarlo a cabo.