¿Por qué el bufón no hace imitaciones?
Mientras sigue negando su evidente derrota bélica, la gran nación de Hemisferio ha decretado varias restricciones: el consumo de pescado, los estudios superiores y el manejo de las artes arcanas, que solo se autoriza a funcionarios o al puñado de franquicias que especulan con ellas en sus muchas sucursales.
Sí, pero ¿Por qué el bufón no hace imitaciones?
Como parte de un programa de becas para estudiar alquimia, Fusa Goretti trabaja para la división más odiada por el pueblo: el Ilustre Cuerpo de Corregidores Sanitarios. Su familia la repudia, sus vecinos le insultan, los niños le escupen y debe dinero a la biblioteca. Es un auténtico garbanzo negro.
Ya, bien, pero... ¿por qué el bufón no hace imitaciones?
Una noche, Fusa ve morir a su jefe a manos de un desconocido. Este emplea su último aliento en confiarle un secreto: El mundo está en peligro… otra vez. Bajo una identidad falsa, acosada por el peligro, vigilada por la ley y sin más apoyo que un alguacil semiorco experto en meter la pata, Fusa cruzará un Hemisferio cada día más hostil, siguiendo un rastro de pistas absurdas para impedir el apocalipsis sin que nadie la tome por loca.
Y sobre todo, hallar la respuesta a esa dichosa pregunta: ¿Por qué el bufón no hace imitaciones?