¿Qué ocurre cuando un dictador muere? Que se desata un
torbellino de intereses para apoderarse del vacío de poder.
Sobre este resbaladizo escenario se constituye la trama de
Un retrato en la geografía, con el acicate de una sociedad
que se ha descubierto rica de pronto con las explotaciones
petrolíferas. Por tanto, Un retrato en la geografía es, ante todo,
un daguerrotipo sobre cualquier cambio de régimen y sus característicos
actores, alentados unos por la codicia y el poder,
y los otros, por la promulgación e implantación de las libertades
públicas secuestradas por el régimen recién periclitado.
Ambos grupos, evidentemente, entrarán en conflicto. Esta novela
recoge, por tanto, ese conflicto tan universal.
Un retrato en la geografía iba a ser la entrega inicial de la
trilogía El laberinto de Fortuna, reducida luego por Úslar
Pietri a un binomio tras la publicación de la definitiva Estación
de máscaras, donde vuelve a reflejar las pugnas
por el poder en Venezuela una década más tarde.