Ponç Puigdevall (1963) ha cultivado la crítica literaria en los diarios El Punt y El País, y ha colaborado también en La Vanguardia y en Time Out. En 1990 ganó el premio Andròmina con Un silenci sec. Después publicó Era un secret y, en Tusquets Editores, Un dia tranquil (2010; Premi Ciutat de Barcelona) y el volumen de cuentos L’atzar favorable (2012), que lo han consolidado como unos de los renovadores de la narrativa catalana contemporánea.