El 18 de julio de 2006, el Gobierno de los Estados Unidos sacó a Virginia Vallejo de Colombia en un avión especial de la DEA, tras ofrecerse esta a testificar ante la justicia estadounidense contra los jefes del cartel de Cali en Miami. Poco después, y gracias a las denuncias de Vallejo, el Gobierno colombiano reabrió los llamados «casos del siglo»: la toma del Palacio de Justicia en 1985 —que se saldó con la masacre de 11 magistrados de la Corte Suprema de Justicia, los guerrilleros del M-19 involucrados, casi un centenar de civiles y todos los detenidos por el ejército tras la conflagración— y el asesinato del senador Luis Carlos Galán en 1989, del que se acusaba a Alberto Santofimio, exministro de Justicia, como autor intelectual. Ambos atentados fueron cometidos por Pablo Escobar y el cartel de Medellín. En 2008 y 2009, Virginia Vallejo testificó en los dos procesos, que se saldaron con condenas de 30 y 24 años respectivamente. En 2010, la periodista colombiana recibió asilo político del Gobierno de los Estados Unidos, y hoy vive en Miami. Su historia con Pablo Escobar ha sido llevada al cine con Penélope Cruz en el papel de la autora y Javier Bardem en el del narcoterrorista.