Se podría decir que África es un paraíso con vocación de infierno, pero se trata de una afirmación no del todo exacta. En ella convive la riqueza con los países empobrecidos, la ilusión junto a los genocidios, la belleza junto a situaciones humanas de extrema crueldad, el analfabetismo con culturas excepcionales. Es un continente contradictorio en el que las grandes minas de oro, cobalto y diamantes conviven con las cifras más altas de sida, malaria y refugiados.
En esta obra, Alberto Masegosa, gran conocedor del Continente negro, nos relata cómo dirigentes políticos contemporáneos como Robert Mugabe, Youeri Museveni y Paul Kagame no han convertido en realidad la esperanza que hace cincuenta años alumbraron líderes históricos como Kwame Nkrumah, Jomo Kenyatta o Julius Nyerere. Una crónica que nos lleva desde las guerras de Sierra Leona, Somalia, República Democrática del Congo, Angola y Darfur hasta parajes idílicos. Se trata de un viaje periodístico por la vida política africana, un retrato en blanco y negro de cómo los políticos han frustrado la vida de sus pueblos mientras que los ciudadanos luchan a diario por sobrevivir sabiendo perfectamente que son seres olvidados por Occidente, salvo en raras excepciones, cuando los medios de comunicación deciden ocuparse de un tema y aparecen en todos los informativos del primer mundo durante una semana. Después llega de nuevo el olvido. Los únicos que no se olvidan de este continente son las multinacionales que explotan, de acuerdo con las clases dirigentes, desde hace años las principales riquezas y, a cambio, tienen a muchos gobiernos africanos como clientes preferentes en la venta de armas.
Este libro también supone la primera colaboración entre Los Libros de la Catarata y Casa África, institución que trabajará desde su sede en Las Palmas de Gran Canaria por unir nuestro país con el Continente vecino.