En este libro el autor refleja una operación de droga que conmovió la región del Caribe. Una avioneta cargada con maletas que nunca se supo ni el origen ni el destino final. Personajes importantes aparecieron enredados en un proceso de investigación delicado en varios países europeos. Al final, solo la tripulación francesa del F-50 fue juzgada, aunque dos de los inculpados desaparecieron antes del juicio, ayudados por exmilitares franceses.
Una rocambolesca operación, donde cada pieza era semejante a una partida de ajedrez que resultó difícil de componer; porque los verdaderos culpables permanecieron ocultos, en libertad, sin cargos, aunque sospechosos por jueces corruptos y altos cargos militares impúdicos.