Una travesía de amor y libros que desafía el tiempo
1912. Harry Widener, un apasionado coleccionista de libros, sube a bordo del Titanic llevando consigo un libro invaluable que acaba de adquirir en Londres. Tras la terrible catástrofe del barco ni el joven ni el ejemplar vuelven a ser vistos. En honor a la memoria de su hijo, la madre de Harry construye una biblioteca en Harvard para albergar su extensa colección y asegurar su legado.
Décadas después, Violet Hutchins, una joven estudiante que se recupera de una gran pérdida, trabaja como auxiliar en la Biblioteca Widener. Cuando sucesos extraños comienzan a ocurrir en el lugar, poco a poco Violet sospecha que puede ser el fantasma de Harry, quien intenta comunicarse con ella para revelarle el secreto que se llevó a la tumba: el paradero del codiciado tomo.
Regresa Alyson Richman con una historia de amor y fantasmas que es un homenaje al poder sanador de la literatura. Una novela rica y poética que nos recuerda que los libros son tan eternos













