Hace tres noches que el colectivo pasa sin abrir la puerta. Con esa frase clara, serena, pero sin dudas, inquietante, comienza la primera novela de la escritora cordobesa Eugenia Almeida (1972). La historia cuenta que en un pequeño y tranquilo pueblo de provincias, a mediados de los setenta, el colectivo deja de parar. A medida que el tiempo pasa, comienza a haber todo tipo de conjeturas. La alteración de la rutina evapora la armonía, la hipocresía se resiente, y salen a la luz envidias, penas y temores tantos años acallados. El chivo expiatorio son una pareja de jóvenes que llegaron de la ciudad y están de paso en el hotel. Son un cuerpo extraño en ese lugar, y son quienes más se desesperan por no poder abandonarlo. Quizás es pura impaciencia, aunque en verdad parecen tener muy buenas razones para querer huir rápidamente de allí.
Poética para acosadores : Nueve cuentos de violencia, locura y soledad
Stanley Elkin
bookMamut
Omar Argentino Galván
bookLos ojos de bambú : Prólogo de Lucía Guerra
Mercedes Valdivieso
book¿Te pasó algo parecido?
Miguel Luna
bookEl Tiempo de la Tortuga : Poema en construcción
Verónica Sirhan
bookNiño quemado
Stig Dagerman
bookConstrucción en abismo
Clara Obligado
bookAvión
Eduardo Muslip
bookLa hiena de la Puszta
Leopold von Sacher-Masoch
bookEl cantante de gospel
Harry Crews
bookTributo a Blenholt
Daniel Fuchs
bookLa conquista de Plassans
Émile Zola
book