Constituye un libro de cuentos exquisitamente violentos o violentamente exquisitos. Lo escueto de sus formas, suma de pocos gestos y diálogos exactos, constituye su mayor atractivo para lectores que gustan este tipo de narrativa
Leche de vaca
Alfonso Raffin del Riego
bookLas cosas humanas
Karine Tuil
bookEuropa
David Llorente
bookUn hombre singular
James Patrick Donleavy
bookNo soy tan zen
José Montelongo
bookCuentos como besos
Santos Rejas Rodríguez
bookUlises 19
Óliver Guerrero
bookPlagio
Patrícia Font
bookPerturbaciones atmosféricas
Rivka Galchen
bookYendo
Analía Couceyro
bookLas bondades de un asesino
Sergio Martín
bookCuando comenzó el silencio
Jesse Ball
book