José de Espronceda es un clásico indiscutible de las poesía española. ¿Qué estudiante no conoce el arranque de su célebre Canción del pirata: «Con diez cañones por banda/ viento en popa a toda vela/ no corta el mar sino vuela/ un velero bergantín»? Pero Espronceda es mucho más: en opinión de Jaime Gil de Biedma, sería el escritor que introdujo la modernidad en la poesía española, que dejó atrás modos y maneras de otro tiempo (cisnes y parnasos), y que con un estilo veloz y penetrante empezó a hablar al hombre y a la mujer contemporáneos en su lenguaje y sobre sus preocupaciones.
El estudiante de Salamanca es uno de los poemas largos más importantes escritos en lengua castellana: un poema narrativo sobre el atractivo del mal, protagonizado por un joven tan carismático como desaprensivo en el amor; un poema que a Byron no le hubiese importado firmar.
Reunimos también en este volumen el resto de sus «grandes éxitos»: las briosas canciones, el poderoso himno al sol y los poemas sobre los matices del amor y la pasión. Piezas por donde desfilan piratas, mendigos, brujas, presidiarios... Antihéroes y marginados sobre los que la poesía española rara vez había puesto la mirada, elevados ahora a poesía con un estilo poderosísimo, moderno, pegadizo.