A finales del siglo XVI, Vicente Mercader, un valenciano que trabaja como alquimista en Paris, recibe de su Maestro el encargo de evitar que una extraña daga caiga en manos de un grupo de hombres armados que están asaltando su casa. Vicente emprende un viaje lleno de peligros que le lleva primero a Valencia y luego a Toledo donde se pierde su rastro.
Casi cuatro siglos después, también en Toledo, Benito Escudero le cuenta a su nieto Lucas sus aventuras de juventud. Una de ellas trata de cómo descubrió en unos túneles, a los que se accede desde el sótano de su casa, los restos de un hombre, una daga y un medallón.
A la muerte de Benito, la abuela le entrega a Lucas, la caja en la que el abuelo guardaba sus recuerdos, trofeos y tesoros. Al revisar el contenido, Lucas se da cuenta de que en las historias que le ha contado el abuelo hay algo de cierto y, junto a su novia Sonia, decide investigar qué hay de verdad en la de la daga. Durante sus investigaciones, entran en contacto con la misteriosa familia Albaterra,
En medio de una trama en la que no está claro quién es amigo, ni quien rival o enemigo, Lucas y Sonia tratan de descifrar, en una carrera contra el reloj, el inimaginable secreto que esconde la daga. Para ello se apoyan en el lenguaje de los antiguos artesanos y en la tradición oral de la enigmática familia que, como en una partida de póker, nunca saben si está destinada a ayudarles o a confundirles.