Mientras en Francia Napoleón III conduce a la restaurada monarquía a la república del Segundo Imperio y Cavour y Garibaldi remodelan el mapa de una Italia unificada, Bismarck, con su Ejército, domina tanto Alemania como el firmamento europeo. En las décadas centrales del siglo xix, Europa experimenta uno de los periodos más convulsos de su historia en el que el nuevo impulso revolucionario pierde fuerza frente a los vestigios del Antiguo Régimen. Sofocadas las revoluciones populares de 1848, se inicia una etapa de reformas autoritarias impuestas desde los estratos más altos de la sociedad que buscaron reavivar y reforzar los viejos sistemas de gobierno; a la postre, esas reformas acabaron por alimentar el espíritu nacionalista. La modernización europea tuvo que esperar hasta el siglo xx para cambiar el mundo.
J. A. S. Grenville, renombrado historiador de la Europa contemporánea, examina en el presente libro los movimientos sociales y sus conflictos desde una perspectiva tanto europea como nacional. Además de este enfoque sociohistórico, el autor también realiza un retrato riguroso y fascinante de los protagonistas de los eventos que alteraron Europa, desgranando sus ideas y ambiciones