La prosa de Mario Delgado Aparín vuelve a narrar las inquietudes y obsesiones de su literatura en esta fábula llena de aventuras.
En la Italia del siglo XVI, en el puerto siciliano de Cefalú, Andrea Chiaramonte, una condesa adolescente, es secuestrada junto a su abuela por el pirata francés Étienne Moreau, traficante de esclavos. Tras una dramática travesía océanica se establece con las cautivas en las costas uruguayas de Rocha, y apoyado por los indios guenoas, inicia un peligroso tráfico con el imperio de Portuga, hasta que Bruno Mauricio de Zabala, gobernador de la recién nacida Montevideo, pone fin a sus andanzas. La abuela Justiniana —heredera de los dones de Epimédines, filósofo cretense, célebre por haber dormido en una cueva una siesta de 57 años— protagoniza dramáticas peripecias. Églogas mágicas, viajes en el espacio y en el tiempo, monstruos marinos, profecías, tempestades y la furia endemoniada del mar configuran este vertiginoso universo fantástico. En esta especie de leyenda novelada Mario Delgado Aparaín ensaya una respuesta a las tragedias que hoy padece el mundo. La literatura, una vez más, es capaz de alumbrar la magia, la ética y los valores todavía escondidos en el mar o en el barro.