Había desenmascarado al enemigo…
Valentina D'Angeli estaba embarazada, y el padre era el hombre con el que había pasado una única noche de desenfreno tras un baile de máscaras. Sin embargo, no debería haber mirado debajo de aquel antifaz mientras él dormía. El desconocido con el que se había acostado había resultado ser Niccolo Gavretti, el mayor enemigo de su hermano.
Para Niccolo solo había una solución posible al problema en el que se encontraban: ella debía casarse con él, aunque no quisiera. Y, si tenía que llevársela a la cama para conseguirlo, sin duda disfrutaría mucho de ello.