Ser analista hoy es una convocatoria y un alegato acerca de la práctica psicoanalítica en estos tiempos en los que, desde las neurociencias y las soluciones farmacológicas, se cuestiona su eficacia. A partir de un análisis de las herramientas y las lecturas clásicas, Hornstein incluye las nuevas teorías de la complejidad para salir de los atolladeros que las distintas escuelas se imponen en sus modelos rígidos y doctrinarios. Esta obra muestra el panorama de un psicoanálisis posfreudiano y poslacaniano cuyo pluralismo crítico no depende solo de las filiaciones teóricas, sino también de una inserción en una clínica que se resiste a diluir las condiciones sociohistóricas del ejercicio real, no libresco, del psicoanálisis.
El modo de desafío que el autor elige es la presentación de un caso: Gunther. Siempre atento al devenir histórico del paciente a quien escucha, no lo disocia del plano histórico-social y su relación con la subjetividad. Como todo paciente, Gunther es un desafío. Vuelve a serlo como caso clínico. El autor se interroga y a la vez propone interrogantes que permitan pensar la práctica desde distintas perspectivas enriquecidas por los nuevos aportes teóricos que él mismo señala en su recorrido.
Hay que señalar también que aquí se retoma y se discute la concesión de Hornstein acerca de las cuatro patologías narcisistas y una revisión del Edipo, potenciadas por las contribuciones que las teorías de Piera Aulagnier, Silvia Bleichmar y André Green aportan a su propio pensamiento.
Un libro necesario, interesante y por momentos desafiante, que permite reubicar el campo del psicoanálisis en el delas prácticas sociales de la actualidad.