El tiempo se hace eterno cuando luchamos contra nuestros sentimientos.
Zoe pensaba que lo había olvidado.
Izan creía que no la extrañaba.
Ambos se autoengañaban.
Una boda, unos amigos que se preocupan por ellos y los sentimientos a flor de piel conseguirán que dos cabezotas cedan al amor.
Porque el olvido no es una opción cuando el corazón toma las riendas de tu vida.