Dos amigas cotillean en el patio de un vecindario, Mencionan a la pasada a Humberto, "el cursi", que vive unos pisos más arriba. A partir de las relaciones de ese muchacho, curtido desde su infancia en diferentes conflictos y sinsabores, asistimos a una versión "a la Sinués" del positivismo social que cundía en la novela naturalista de aquellos años.
Una herencia trágica está ambientada, como acaso ninguna otra de las novelas de la autora, en un barrio popular. Y expresa su preocupación por lo que ella consideraba falta de cultura y religiosidad en las clases bajas.
María del Pilar Sinués (Zaragoza, 1835 - Madrid, 1893) fue una escritora española, autora de más de sesenta novelas y otros textos muy leídos en la segunda mitad del siglo XIX.
Sinués consagraba sus trabajos principalmente a un público femenino. Durante mucho tiempo predominó en ellos un registro didáctico ligado a las tareas domésticas. Sin embargo, no se ajustó a tales expectativas ni en su vida personal, signada por una independencia cada vez mayor, ni en la construcción de las protagonistas más complejas de sus novelas.
Participó en diferentes círculos literarios y culturales.
Dirigió las revistas El ángel del hogar y Flores y perlas, la última, fugaz, con una redacción íntegramente compuesta por mujeres.
Algunos de sus principales libros: Fausta Sorel (1861), El sol en invierno (1863), El becerro de oro (1875) y el epistolario La vida íntima (1876).