Colección Centinela

Saga • 6 libros

Como acto fisiológico, el dormir es tan indispensable como el comer o el respirar, pues hacerlo repara nuestro organismo y nuestro cerebro de los esfuerzos de la vida diaria, con la curiosidad de que además de dormir, soñamos, y al soñar reparamos los vacíos del alma, conectamos con los ausentes, volamos, vemos el futuro, recuperamos el pasado, mejoramos el presente y viajamos a través del tiempo y el espacio de manera inmediata, porque en el mundo de los sueños no hay restricciones físicas ni temporales que nos aten y limiten. Soñamos de manera natural, como todos los animales, pero también podemos programar y dominar nuestros sueños para que completen nuestra realidad, y viceversa, es decir, que podemos programar y dominar nuestra realidad para que completen nuestros más anhelados sueños. Entremos, por tanto, al dominio de los sueños.