Este libro explica cómo fue el abandono de niñas y niños en la Barcelona del siglo XV, deteniéndose en tres etapas esenciales: la escena del abandono, el cuidado de los lactantes en manos de nodrizas y el aprendizaje en casas ajenas. En cada fase se revisan las condiciones de integración y marginación, la presencia de lo femenino y los relatos de amores y desamores. Las historias que aquí se recogen permiten comprender las diferentes dimensiones del abandono, acto que involucraba no solo a los infantes expuestos, sino también a su entorno. Los niños en su mayoría eran abandonados en las puertas del Hospital de la Santa Creu de Barcelona durante las horas menos transitadas para evitar el juicio social. Las cartas que acompañaban a los infantes reflejan el drama de la pobreza y, por ende, la incapacidad forzosa de las madres para asumir el rol de la crianza. Al reconstruir el contexto de la época, el lector tiene la posibilidad de realizar un ejercicio de empatía que vuelve el foco de atención al presente. Es inevitable percibir las duras realidades que se mantienen a lo largo del tiempo y el casi irreparable sufrimiento que causa la soledad en los primeros años de vida.