Han transcurrido cinco años desde que el apocalipsis se desatĂł en La hora muerta. El mundo ha cambiado y los seres humanos luchan con desesperaciĂłn por sobrevivir y conservar los Ășltimos restos de cordura. El cĂrculo se cierra. Los caminos han sido trazados. Conducen al lugar donde se decidirĂĄ el destino de la humanidad. Conducen a La catedral de la carne.