Nuevas relaciones con el conocimiento, nuevas instituciones, nuevos reglamentos, nuevos textos, nuevas discusiones: el ingreso a los estudios superiores constituye un complejo desafĂo para la pedagogĂa del nivel que debe asumir este trayecto de formaciĂłn de los estudiantes como una problemĂĄtica especĂfica.
Revisar las expectativas sobre lo que deben poseer como capital cultural quienes ingresan a los estudios superiores, quĂŠ prĂĄcticas de lectura y escritura deberĂan manejar con idoneidad, cuĂĄles son los textos cuyas fĂłrmulas probadas asegurarĂan el ĂŠxito en los nuevos contextos es el punto de partida que invita a una reflexiĂłn pedagĂłgica que âsin dejar de reconocer los obstĂĄculos o dificultades que los nuevos estudiantes encuentran a la hora de leer y escribir textos en el nuevo espacioâ no se agote en la mirada deficitaria sobre los ingresantes.
Ellos llegan a la puerta de los estudios superiores siendo poseedores de una experiencia cultural diversa, y desde ella construyen sus recorridos hacia las propuestas que el nivel les ofrece. Por eso, las prĂĄcticas de lectura y escritura en zonas de pasaje requieren un abordaje amplio que ponga en juego otras categorĂas mĂĄs allĂĄ de las referidas a las cuestiones textuales. Proponemos entonces transitar ese modo âsocial e histĂłricoâ de apropiaciĂłn de la cultura escrita en diversidad de gĂŠneros mĂĄs flexibles que permitan a los jĂłvenes ir apropiĂĄndose de las convenciones epistemolĂłgicas del nivel.
Los autores, profesores e investigadores de universidades nacionales y de profesorados terciarios, ponen en juego en Leer y escribir en las zonas de pasaje una serie de experiencias y una diversidad de reflexiones acerca de este momento crucial de la formaciĂłn de los futuros graduados del nivel superior.