Un libro concebido como un diario de vida. Como un cuarto lleno de recuerdos que, de puro convivir con ellos, ya no registramos.
Letras imperfectas es una reconciliación con la ilusión de que todavía se puede sentir así, como sentíamos cuando nos enamorábamos para toda la vida. Leer y releer sus páginas es primaveral, reconstituyente y nos da un espejo en el cual vernos más buenos.